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516 ¿Qué es el código SWIFT que está castigando a Rusia?
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¿Sabes qué es el código SWIFT? Son muchas las sanciones que se están aplicado a Rusia con motivo de la guerra contra Ucrania. Otra de las sanciones es el veto a los deportistas rusos de grandes campeonatos desde el Comité Olímpico Internacional, Unión Internacional de Patinaje sobre Hielo y un largo etcétera. Sin embargo, hoy te contamos todo lo que necesitas saber sobre el código SWIFT de los bancos y, sobre todo, cómo esto es una medida económica que afecta de lleno a los bancos rusos en el contexto de la guerra en Ucrania y las sanciones internacionales contra Rusia.
¿Qué es SWIFT?
SWIFT es una red de alta seguridad que usa la banca para intercambiar información. Se trata de un sistema de mensajería que permite que los pagos se realicen de forma segura a través de las fronteras nacionales y facilita de forma amplia las transacciones internacionales.
A pesar de que no es el único sistema, es el dominante en el mundo. Mueve más de 100.000 millones de dólares diarios en pagos liderando absolutamente este en lo que se refiere a este tipo de plataformas. Este sistema se fundó en el año 1973 e incluye a más de 11.000 instituciones de todo el mundo repartidas por más de 200 países.
Cuando queremos hacer transferencias internacionales necesitamos el código SWIFT del banco. Si el otro banco no tiene SWIFT… ¿cómo podemos hacer transferencias? Si tu tienes una cuenta en un banco sin código SWIFT… ¿cómo te van a ingresar dinero?
¿Por qué podría hacer daño a Rusia?
Al no poder usar el código SWIFT la banca rusa quedaría aislada, al menos parcialmente. Aunque estas entidades utilicen un sistema paralelo, se bloquearían todas las ventas y cobros dificultando enormemente las operaciones internacionales. En 2014 Rusia lanzó un estudio que indicaba que perderían un 5% de su PIB de ser excluida del código SWIFT. El motivo es que las empresas que tengan dependencia con recursos del exterior se pueden ver seriamente comprometidas.
El único precedente reciente es el realizado contra Irán en 2012. El país de los Ayatolás fue expulsado a raíz de la escalada de tensión por sus investigaciones para lograr armas nucleares. Una vez impuesta esta sanción excepcional perdió cerca de la mitad de sus ingresos por petróleo y el 30% de sus comercio exterior, tal y como recoge el Instituto Finlandés de asuntos Internacionales. Según la propia institución, la medida «terminaría con todas las transacciones internacionales, desencadenaría la volatilidad de la moneda y provocaría salidas masivas de capital».
El precio a pagar para Occidente
Para Occidente, y en particular para Estados Unidos, también hay un precio a pagar y muchos riesgos. Por un lado, presidentes de la Unión Europea como Mark Rutte (Países Bajos), reconocen que «tendría enormes repercusiones» para Europa Occidental. El motivo fundamental es la mayor dificultad que encontraría el viejo continente para adquirir recursos estratégicos que vienen de Rusia. Además, los acreedores financieros se encontrarán con serios problemas para recuperar su dinero.
Desde el Ministerio de Asuntos Exteriores alemán han destacado que el motivo de que el código SWIFT se mantenga operativo para algunas instituciones financieras rusas no se debe solo a la necesidad de garantizar el abastecimiento de materias primas y energía, sino que «se trata de transacciones en todos los ámbitos, entre otros el de la ayuda humanitaria, el intercambio comercial legítimo, la sociedad civil,» argumenta la portavoz Susanne Sasse. También admiten que podría haber llevado a muchas empresas alemanas a una situación complicada, porque el SWIFT habría hecho colapsar de golpe todo el comercio entre ambos países.
Rusia tiene su propio SWIFT
Desde que en 2014, con la invasión de Crimea, esta medida fuera una amenaza muy real para Rusia, Putin ya empezó a preparar su propio sistema de pagos, el SPFS. Según el Kremlin, actualmente 399 usuarios participan de este sistema y en 2020 ya se usaba tanto como el SWIFT en las operaciones rusas.
El verdadero riesgo viene de oriente. China lleva años detrás de su propia alternativa, el CIPS. Este sistema ya cuenta con varios bancos rusos y podría permitir a Rusia eludir en buena medida los inconvenientes de ser expulsada del SWIFT. Para China la ventaja es evidente, reducir la dependencia del dólar y expandir su influencia económica. El CIPS se podría convertir en una alternativa real.
Las criptomonedas entran en escena
Por otro lado, Putin cuenta con la alternativa de las criptomonedas para pagos transfronterizos. Según Bloomberg el Yuan digital podría ser utilizado para este fin y, de este modo, utilizar las stablecoins para eludir esta sanción por parte de Occidente. Una alternativa que reduciría el dominio económico estadounidense provocando que la sanción tenga un verdadero ‘efecto boomerang’.
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